Ahí estábamos sentadas en el salón con unas cervezuquis (es inevitable que no rule el alcohol) y una tapitas de queso, mi madrina, mi madre, mi hermana y yo. Hablábamos de cosas de la vida y de lo perra que puede llegar a ser a veces esta.
Yo de esto no sé mucho, soy joven aún y la vida todavía no me ha apaleado lo suficiente. Pero mi madrina y mi madre son unas expertas en el tema y lo comentaban a guasa entre cervezas, risas, arrugas y maquillaje.
De repente me acordé y le dije a mi hermana al oído: -Tenemos que hacer bote para comprar el regalo del día de la madre.
Mientras, las mirábamos a ellas, una madre y otra no, pero las dos iguales. Mujeres, resilientes, capaces de superarse y salir fortalecidas. Embajadoras de la positividad.
Capaces de comentar una desdicha y pintarse el morro a la vez.
Mujeres, que se implican en proyectos a largo plazo y los resisten, que afrontan los retos con actitud. Ellas son así, aunque no hayan desarrollado la maternidad genéticamente.
Mi hermana no es madre y es resiliente, doy fe de ello. El otro día invitó a sus sobrinos a dormir a casa, la idea era pasar una noche divertida con ellos aprovechando que ya tenía camas y nórdicos nuevos. Lo que iba a ser una noche “My favorite things” acabó siendo una peli de terror, todos vomitando en la alfombra y las colchas. Pero resistió, y al día siguiente me lo contaba muerta de risa.
Ser resiliente no implica ser madre, pero ser madre sí implica serlo y es un proyecto a largo plazo que requiere mucha resistencia.
Para todas las madres, que cada día nos cuidan y se implican hasta el final con una sonrisa en la cara. Ángeles y guerreras que saben disfrutar de la maternidad como el mayor tesoro, aunque estén hasta el moño . Mujeres que ven siempre el vaso medio lleno aunque se mueran de sueño.
Que hacen de la vida una comedia para reírse de ella. Porque ser madre es positivo, coña:
- Nunca te sientes sola porque siempre hay alguien pegado a tus faldas.
- No necesitas ir al gimnasio porque haces halterofilia todos los días.
- Nunca caes en cama porque no puedes ponerte mala.
- Si tienes ojeras las gafas te quedan “divain”.
- Si estás hecha una piltafra, hay alguien que te dice que eres la más guapa del mundo.
- No pasas hambre porque siempre te comes las sobras.
- Eres la reina de las fiestas porque practicas el insomnio.
- Como buena mujer siempre tienes quien te acompañe al baño.
- Nunca te aburres porque siempre hay alguien que quiere jugar contigo.
- En 10 minutos te pones bella porque es el único tiempo que te queda.
- No necesitas despertador porque todos los días canta el gallo.
- No vas al psicoterapeuta porque tienes sesión de risoterapia en casa.
- Lo mejor es que tienes menos cosas y eres más feliz, el sacrificio se convierte en alegría.
-
Y siempre tendrás a alguien que te dirá: ¡te quiero hasta la luna!
Isa me
Encanta tu blog y cómo escribes como te expresas y este me
Ha
Fascinado todo es
Tan cierto un súper
Beso
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Muchas gracias Mar. Me alegro un montón que te guste 😉
Un besote!!
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Esa es la mujer que quiero que sea mi niña!!
Asi que espero haber sido ejemplo, si no bueno al menos adecuado!
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Seguro q si Arantxa!
Te sentirás orgullosa!
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